Requisitos para montar trasteros en un local
Los trasteros se han convertido en una herramienta básica de almacenaje tanto para particulares como para empresas, pues permiten contar con un espacio extra complementario al de los almacenes para guardar todo tipo de productos y mercancías.
Ahora bien, a la hora de poder establecer un trastero con el que mejorar la gestión administrativa en tu negocio no es tan fácil como contar con el espacio adecuado para habilitarlo, sino que contar con un permiso es un requisito esencial para poder utilizar esa zona como lugar de almacenamiento.
A continuación, te ponemos en conocimiento sobre todas las licencias y permisos necesarios para habilitar este espacio y sobre el gasto en obras y en mantenimiento que suele conllevar esta inversión.
Requisitos para montar trasteros
Antes de lanzarte a montar un negocio de trasteros es esencial optimizar la superficie que se va a utilizar para el almacenaje, así como cumplir con la normativa vigente respecto al uso comercial y de almacenaje.
Todo esto significa que es esencial contar con una licencia válida de apertura si se quiere hacer un negocio con los alquileres, pues este intercambio de servicios se entiende como una actividad económica regulada por las leyes.
Asimismo, junto a esta licencia será necesario adjuntar un documento en el que se manifiesten los siguientes requisitos:
- Tipo y descripción del local o nave en la que se va a ejercer dicha actividad.
- Medidas y usos pormenorizados de todas las superficies.
- El emplazamiento del negocio.
- Un informe detallado que evidencie la actividad que se va a desarrollar, así como el número de personal y sus horarios.
- Una justificación firmada de que se cumplen las normas de accesibilidad, de protección contra el ruido, de protección contra incendios, instalaciones eléctricas, de eficiencia energética y de suministro de agua sanitaria.
- Un informe sobre el estado de las instalaciones higiénicas y de ventilación, además de una previsión de los residuos que se generarán con la actividad.
Es esencial contar con una licencia válida de apertura si se quiere hacer un negocio con los alquileres, pues este intercambio de servicios se entiende como una actividad económica regulada.
Normativa sobre trasteros
La LPH, o Ley de Propiedad Horizontal, cuenta con diversas variantes que hay que conocer respecto al uso y comercialización de los trasteros. La ley manifiesta que los trasteros se podrán utilizar para almacenar todo tipo de objetos personales mientras que no sean tóxicos o que comprometan de ninguna forma la salud de los vecinos o casas colindantes al trastero.
Esta misma ley advierte de que no es legal vivir en un trastero, pues no cumple con el Código Técnico de la Edificación y, de la misma forma, tampoco se considera legal utilizarlo como discoteca, despacho, cocina o taller de vehículos, ya que no se permite incluir aparatos electrónicos de uso continuado, ni manipular en el interior ningún tipo de sustancia química que pueda comprometer la salud local.
Asimismo, esta normativa sobre trasteros delimita los objetos de almacenaje, prohibiendo cualquier tipo de objeto que sea inflamable, que pueda explotar o que vierta líquidos peligrosos.
Si se le quiere dar otros tipos de uso a los trasteros es imprescindible tener una licencia que pase por el cumplimiento de ciertos requisitos legales. Para poder efectuar la apertura y comercializar el servicio, además, es necesario declarar que el local cumple con las normativas siguientes:
- El Reglamento de Seguridad Contra Incendios en los Establecimientos Industriales.
- La normativa de Residuos y Suelos Contaminados.
- El Código Técnico de Edificación.
- La normativa de Señalización de Seguridad y Salud en el Trabajo.
- El Plan General de Ordenación Urbana.
- La normativa Prevención de Riesgos Laborales.
- El Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión que permite llevar a cabo una instalación eléctrica.
- El Decreto 293/2009 respecto a la accesibilidad de las infraestructuras.
- La normativa de Calidad del Aire y Protección de la Atmósfera.
¿Cuánto cuesta montar un negocio de trasteros?
Construir un trastero para una vivienda puede costar en un rango de precios desde los 500€ hasta los 5.000€ en función de las características del proyecto. Esto incluye mano de obra y puede incluir también o no los materiales de construcción.
En general el precio de construcción de trasteros se calcula por metro cuadrado, por ello los precios son optativos y dependen de los costes de las empresas de reforma.
Ahora bien, si lo que se quiere es montar un negocio de trasteros que sirva como empresa, este presupuesto se ve inflado sobremanera. Este modelo de negocios es uno de los más rentables hoy en día, pues reúne diversos factores propicios para resultar en grandes beneficios como pueden ser la baja mano de obra, el escaso mantenimiento y los tiempos de retorno de la inversión tan reducidos.
Sin embargo, al ser un sector tan desconocido en la industria española es fácil que si te estás planteando esta salida te puedan surgir numerosas dudas a la hora de montar un negocio de trasteros; en especial en lo referente a la inversión necesaria para sacar el proyecto adelante.
Este modelo de negocios es uno de los más rentables hoy en día, siendo sus beneficios la baja mano de obra, el escaso mantenimiento y los tiempos de retorno de la inversión tan reducidos.
La superficies en las que se montan trasteros varían en un rango de entre los 300 m² y los 4.000 m² en adelante, dependiendo del presupuesto disponible para invertir en la reforma y según las miras de negocio de cada emprendedor.
Aun así, para todos los negocios de trasteros hay ciertos elementos esenciales a tener en cuenta. Estos son los sistemas de software de gestión del negocio y los sistemas de seguridad para el almacenaje sin los que resulta imposible llevar a cabo la adecuación de local.
La adecuación es esencial, ya que para habilitar un sistema de trasteros es obligatorio cumplir con la normativa y con las exigencias que esta establece si no se quiere incurrir en un delito. Y es que cada local o nave requerirán unas necesidades urbanísticas en función al espacio vertical y horizontal. Si se trabaja con una nave aislada harán falta menos obras que si la nave se encuentra cerca a otros locales.
En cuanto a cifras, lo habitual es que la cifra de inversión fluctúe entre los 80€/m² hasta los 120€/m² , sin incluir el IVA. Esto puede traducirse en naves de 500 m² que necesite una inversión que parta de los 15.000€ hasta los 45.000€, aproximadamente, Mientras que otras naves de 2000 m² requieran un presupuesto que ronde desde los 25.000€ hasta los 85.000€.
¿Qué licencias y permisos son necesarios para montar un negocio de trasteros?
Para poder abrir un local de trasteros de alquiler es necesario tramitar los permisos de apertura y obtener la licencia de actividad. Además de todo esto, no se podrá llevar a cabo un negocio sin legalizar las instalaciones eléctricas ni tampoco sin contar con cualquier otra licencia de obras menores, si es que se adecua el local para su uso.
Cualquier negocio de self storage debe ser viable legalmente conforme a la normativa urbanística. Se atenderá a diversos tipos de actividades según ciertas limitaciones y condicionantes.
Además, cada municipio cuenta con un proceso distinto para la obtención de las licencias, lo que implica que no existe una forma estándar de conseguir los permisos, y esta obtención de licencias variará según la Comunidad Autónoma.
¿Es rentable montar trasteros?
Al hablar de la rentabilidad que se puede obtener mediante la comercialización de un centro de trasteros se puede afirmar que, por lo general, es bastante alta.
Sin embargo, para sacarle el máximo partido a este negocio lo más importante es la inversión inicial con la que ponerlo en marcha, ya que la calidad con la que se efectúen las obras será determinante para el éxito o el fracaso.
La rentabilidad que se puede obtener mediante la comercialización de un centro de trasteros es bastante alta.
Vale la pena llevar a cabo un estudio técnico y económico del proyecto y poner la construcción en mano de profesionales que se aseguren de realizar una instalación adecuada.
Por ello, lo más importante es calcular los gastos de explotación, los de personal, de mantenimiento, las compras, las amortizaciones, los tributos y cualquier otro servicio externo. A esto habrá que sumarle los gastos de alquiler, si los hubiera, para efectuar el cálculo financiero con el que conocer el retorno de la inversión y los beneficios.